Penetras en mi sombra vacía
Mis pupilas alineadas al cenit se humedecen de ceniza
El fuego ya no está, las palabras sobran.
¿Cómo buscarle al aire un cáliz de esperanza
Un haz de luz que se cuele entre el polvo?
Un zorzal canta milagros inútilemente
Nadie le ha dado la noticia
Iris ha muerto, mañana la enterramos.
¿Qué zumbido no cae en cuenta?
El suelo retumba en hedores húmedos
Se abren las raíces como acunando la carne
La Tierra espera la paciencia meditando finales .
¿Qué debe suceder, que puede partiresta melodía retórica, absurda, pastosa?
El eco de la nada grita y blasfema
Reclama su presa desecha en jugos gástricos
No hay tabla de salvación.
¿Acaso los pies del colgado no se mueven al son de la muerte?
Tikhé juega a los dados sin repetir nunca la cifra
Teje precisas mantas con doradas tramas y urdimbres
Grita: ¡No te equivoques! ¡No me desafíes!
No la escucho.
El viento siempre gira sobre su propio eje.
No le creo.
Todas las escaleras cruzan el cielo.
Leo en ellas un mensaje cifrado:
"Levanta tu vista y sonríe. Todo está por hacerse"
Así sea.
Kristel, losiento sé que he sido un poco ingrata.
ResponderEliminarBien ultimamente mucho, desde todos los aspectos.
Oye por qué será que tú justo apareces cuando más necesito de alguien.
Me gustaría hablar contigo, pero ahora si de verdad.
Salgamos un día, donde sea, cualquier lugar.
Avisame si quieres.
Adiós